lunes, 14 de noviembre de 2011

REFUGIADA EN MI TRISTEZA

Refugiada en mi tristeza, esbozo siempre sonrisas,
también recojo caricias, del viento fiel consejero,
me lleva siempre certero, hacia la orilla del mar.
Allí te vuelvo a escuchar, entre las olas traviesas.

Me interno en ese paraje, allí te veo a mi antojo,
no hay personas, sí, tus ojos que incitan a disfrutar.
Así te vuelvo a besar, tantas veces como quiero,
a  lo lejos veo a la luna  y   nuestra ensoñación.

No pago por todo esto, ni me interesan razones,
soy feliz,  por  ilusiones, que me hiciste conocer.
Floja soy, ya no lo niego ambivalente cuestiono,
por qué si siento tanto, me duele así, este amor.

Mis latidos lentamente, no se quejan más lo sufren,
no verte jamás yo supe, tanta angustia iba a sentir.
Necesito tu energía,  devuelva estado candente,
a  mi corazón que advierte, sin  ti, no sabrá  vivir.

No necesito alabanzas, que calmen  este momento,
Me conformo con lo bello y  lo sincero, es tu amor.
Sólo aceptaré en la vida, me  demuestres algún día,
querer no es causa perdida sabes, sólo tú eres mi sol.

No hay comentarios:

Publicar un comentario